La merluza, rodeada de corazones de hielo, aparenta estar fresca, que no es lo mismo que serlo. No se engaña, en cuanto pase por las manos del Chef de turno sólo será un trozo manipulado sin identidad.
Ésa no es una boca presentable para gritar que añora el Océano donde las fronteras y los horizontes sólo son efectos ópticos. Ni siquiera una boca para quedarse boquiabierta sin parecer más merluzo que merluza.
Con su nueva dentadura, prueba sin éxito a ser agresiva con sus congéneres más indefensos. Hasta intenta pasar de todo y contemplarse el ombligo, pero cae en la cuenta que las merluzas sólo tienen ombligo cuando las digieren. Llora desconsolada.
Aquí tenéis otra merluza, que ANTES era una irreverente y oronda señora despreocupada, hasta que se le cerró el estómago por un empacho de sandeces y dislates.
Con el estómago de pitminí y la intención de verse los pies en la ducha, se ha puesto a dieta.
Ha dejado de consumir estupideces, que engordan una barbaridad. Ha descubierto que tiene intolerancia a las banderas, sobre todo a los palos de las mismas que son muy indigestos.
Con la dieta restrictiva que se ha impuesto, ha perdido mucho kilos, algunas turgencias y también la esperanza, que se ido detrás de sus lorzas.
Y así la vemos en su DESPUÉS...
..de no comer más los cocidos que le ofrecen como único plato disponible, con la intención de que crea que el cocido patrio es igual de ligero y creativo que un plato de la nouvelle cuisine.
Y, a estas alturas del cuento, todos sabemos que un "cocido completo" en raciones patriotas es desproporcionado para estómagos adoloridos, selectivos y sibaritas.
Así que, hasta que pasen las "tentaciones" con las que su entorno la quiere atocinar, se parapeta tras triple enrejado con libros, películas, música, cámara y PC. Sin saltarse su dieta restrictiva de modelos patrios y otras exaltaciones.
Pese a que, como la merluza de la primera historia, no se engaña...
...espera que el ombligo que al final la digiera, como un trozo sin identidad, esté libre de pelusa y no la castigue con algún Paraíso no solicitado.
Este cuento acaba fatal, no fueron felices... y, para colmo, nadie comió perdices, porque todas las merluzas están en contra de los merluzos que cazan para divertirse.
Este cuento acaba fatal, no fueron felices... y, para colmo, nadie comió perdices, porque todas las merluzas están en contra de los merluzos que cazan para divertirse.
"El individuo ha luchado siempre para no ser absorbido por la
tribu. Si lo intentas, a menudo estarás solo, y a veces asustado. Pero ningún
precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo" (Nietzsche)
Hola, amigos y bloguers, hice las fotos de la merluzas hace dos días y en el camino de vuelta a casa con lo que iba viendo y oyendo se me ocurrió este cuento loco.
ResponderEliminarNo puedo explicar como se hacen conexiones tan extravagantes en mi cerebro, creo que vengo así de serie, pues mi madre ya me decía de pequeña "mira que eres rara, hija, que no seyo de donde sacas esas ideas"
Me gusta fantasear con que a mi madre la abdujeron y soy hija de las Galaxias, por eso no encajo en tradiciones, costumbrismo y demás parafernalias patrias.
Y lo que lloré viendo ET, que parecía que en vez de ojos tuviera agujeros negros infinitos, es una prueba más.
Sea como sea, espero que este cuento loco te provoque algo, sonrisa, empacho, ganas de ponerte a dieta también o que no vuelvas a comer merluza por compasión.
Muchos besos y os voy visitando con calma y placer.
De conexiones extravagantes, ni mijita, están muy bien hilvanadas. Me identifico mucho con tu dieta, ya que también paso, de palos con trapos y de otras exaltaciones, pero a pesar de todo no adelgazo, ya que a donde va un buen cocido, con todos sus avíos, no va nada.
ResponderEliminarBesos.
Tu texto me ha arrancado sonrisas en esta mañana de otoño donde el calor sigue sofocando.
ResponderEliminarLa merluza
Tanto tiempo sin escuchar ese nombre...
Me lleva al pasado de Buenos Aires ...
Y tu arte me hace sonreir
la magia de tu cerebro
enrollado en imágenes que van saliendo.
Tu alma de poeta cuando escribis sobre el amor o sentimientos ....
rebalsa en mi blog haciendo temblar las letras.
Sos grande y me encanta el humor que sale de tu mente
Las fotos casi mágicas
Les das olores como si las estuvieras pintando.
Llenamos nuestros momentos malos
de buenos recuerdos
de locuras insanas
y maravillosas como lo es hoy
tu TEXTO-IMAGENES Y lo que dejás en nosotros después de
Leerte.
Gracias por estar ahí siempre
Mucha
El individuo ha luchado siempre para no ser absorbido por la tribu. Si lo intentas, a menudo estarás solo, y a veces asustado. Pero ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo.
ResponderEliminarLo logramos...
Beso
no sé que es una merluza, seguro que por aquí no existe, o quizás si, pero no soy muy adepto a los pescados, con la justa trago bonito, trucha, toyo, y atún en lata de vez en cuando... por aquí se dice que comer pescado es bueno para la salud, omega 8, y adelgaza si comes mucho... pero la costumbre es comer pollo a la brasa con papas fritas y hasta mayonesa, luego está la comida china, y chicharrones de cerdo... yo prefiero las verduras, desde brócoli hasta caiga, claro con pollo, me encanta, bueno, ya me dio hambre de tanto hablar de comida, jejeje, besos...
ResponderEliminarJajaja pues sí, me has hecho sonreír con tu divagar de extraterrestre, cosa que es de agradecer en los tiempos que corren. A mí también me dicen a menudo que no soy de este planeta :DD
ResponderEliminarNo obstante, en una cosa no te sigo... las tradiciones me gustan: son el condimento, la sal de cada terruño. Pero no hay que confundirlas con las parafernalias patriotas que son el exceso de sal. Y ya sabemos lo que pasa con el exceso de sal: te enferma. ;)
Un abrazo y una sonrisa. :)
Ps ¿quieres una infusión de anís...un omeprazol? :)
ResponderEliminarMe gustas...y no tienes remedio...gracias a dios.
Abrazo loco
Muy lograda la imagen, con esa sonrisa socarrona. El logro de tus textos se da por añadidura. No en vano Soco vaticina que no tienes remedio :))))
ResponderEliminarMuy propio de ti presidir tabernas pompeyanas, irreverentes, antibeatos y antibanderas... ¿Quién las inventaría?
Muy gráfica también la imagen enrejada, que espero que quede solo en eso, imagen, pues en ella ya se aprecia ese régimen que moldea tu figura salerosa :)))) Y algo enigmática tras las mallas...
La dentadura de la merluza más parece la publicidad de cualquier Vitalden franquiciado... Aún así te ha quedado muy bien. ¡Talento fotográfico de la artista!
Fuerte abrazo, Tesa... ¡Pára qué cambiar!...
Siempre esa chispa, esa punta que le sacas, que le encuentras a la roma realidad, últimamente más afilada.
ResponderEliminarUn abrazo.
SAM:
ResponderEliminarHola, Sam, que largo se me está haciendo este verano. Quiero otoño y lluvia y seny y algo de sentido común.
la verdad es que esa "chispa" que dices, es sólo una actitud de defensa, a mi los malos rollos no me van. Me resultan indigestos.
Igual que mi madre afirma que era rara desde pequeña, también es cierto que encuentro muy comica a la gente que se pone trascendental, exaltada y drámática.
Cuando era pequeña y alguien me chillaba al regañarme me entraba la risa y ganas de hacer pis.
A esta niña le falta un tornillo, decían.
Así que creo que, lo mío como dicen por ahí no tiene remedio, es un defecto de fábrica.
Un abrazo, y no te olvides de mimarte, Sam
La merluza ha posado muy bien para ti Tesa, una entrada muy divertida.
ResponderEliminarFeliz semana.
Un abrazo.
Hola Tesa.. La merluza y su metamorfosis, la merluza antes y después, parece mentira que un bicho tan feo, luego según quien lo cocine, este tan rico, a mi me gusta en salsa verde, al horno, con almejas, a la sidra, a la plancha, a la marinera, a la vasca, a la gallega, a la catalana, y de todas formas, eso si regada con un buen vinito un albariño o quizás un sauvignon blanc.
ResponderEliminarQue mas da lo importante es la buena compañía como la de la taberna no apta para beatos.. (me refiero a la segunda..jeje)
Abrazos...
Primero temble ante la vision terrorifica de ese pez casi biblico... Ohhhhhh
ResponderEliminarLuego, ante la Pompeyana, no pude sino sonreir... Es un lugar que conozco, amiga... Y me encanta
Un abrazo
jajajaj Teca! qué bien te lo pasas y qué bien nos lo haces pasar arrancándonos esa sonrisa mientras vemos tus fotos. Qué tía! Me encanta tu elegante sentido del humor.
ResponderEliminarMuchos besos ;)
Pero qué buena historia! ser absorbido por cualquier cosa suena fatal. Dios, o lo que sea, nos libre
ResponderEliminarUn abrazo con ganas de probar un buen cocido español.
Maru
Esta entrada me la tengo que leer con la cabeza fresca para saborearla bien.
ResponderEliminarUn beso, Tesa.
Que bueno! Yo me quedo con lo primero que se me vino a la cabeza...
ResponderEliminarTodos somos bastante merluzos!!!!
Me encantaba esa expresión en el EGB de una monja...
-Sois bastante merluzas chiquillas...
Ahora me descojono (perdón) recordándolo😂😂😂😂
Muchos besos!!!!!!
Me encantó la dentadura tb... jeje
😚😙😙😙😙
a esta altura de mi vida no creoen ninguna persona con poder, ningún político. sólo creo en mis amigos, que tanto me han dado!
ResponderEliminarMe gustan tus cuentos locos, con situaciones que no tienen remedio, Tesa.
ResponderEliminarEs mejor estar locos que ser tontos, pues tu imaginación nunca cesa.
Y yo te voy detrás para ver si aprendo un poco de algo de lo que dices tu.
Y de lo que haces.
Un beso gigante.
Pues yo digiero mejor los astiles de las banderas que las banderas: estas me producen cagalera :)
ResponderEliminarLa gorda de la taberna pompeyana me pone.
"Cuando era pequeña y alguien me chillaba al regañarme me entraba la risa y ganas de hacer pis" :D :D No tienes remedio, Tesa :D (Sigue sin tenerlo) Un beso.
Una manera tan imprevista y audaz que das a las cosas que ves y reinterpretas en ese mirar tan personal e intenso de tu parte...
ResponderEliminarMe sorprende siempre tu pluma , me sacas sonrisas y asombros...
Hay lecturas que yo alcanzo a ver entre lineas de esas palabras tuyas, pero que seguramente solo despiertan también mis propias conjeturas de las situaciones...
Sigue así, ese reinventar y crear en ti se cumple muy bien.
Gracias.
Jajaja, querida, Tesa, siempre me sacas una sonrisa y eso es de agradecer en los tiempos que corren...
ResponderEliminarMe encanta tu locura. Es más, me identifico contigo en muchas cosas.
Esa merluza con sus dientes tan perfectos, me sugiere un montón de cosas respecto a los "merluzos y merluzas" que habitan el planeta. Tú, lo has hecho muy bien. Jajaja, eres la monda lironda...
Oye, déjame decirte que te veo guapísima. No se si será la dieta o la genética, pero esa sonrisa tuya vale un imperio...
Tesa, eres adorable.
Gracias por estos ratos.
Besos.
Pues me ha gustado mucho, con todo y humor negro. Buenas fotos y textos
ResponderEliminarPaz&Hermandad
Isaac
Ajajaj! Un cuento bien "friki" Creo que esa palabreja, que no conozco, es la que usas para situaciones un tanto surrealistas ¿cierto?
ResponderEliminarLa merluza no me gusta...pero mucho menos "LOS MERLUZOS" que se aparecen por doquier y en todo el mundo
De las dietas?
Nada! que ya pasó la boda de mi hija!!! jajjaaj
si al fin y al cabo vamos a partir de este mundo con banderas o sin ellas, con "gordura" o "flacura", y ni hablar de los "palos" de las bandera que me hacen acordar a la frase "palos en la rueda"
Insuperable la frase de Nietzsche...Sin dudarlo ...¡ningún precio!
besos bella y querida artista del ilusionismo
Me parto con tus posts y tus montajes fotográficos, cuánta creatividad. La frase que más me ha gusto es lo de la intolerancia a las banderas. Soy Soy de vuelta al mundo blogil.
ResponderEliminarTesa, yo también debo ponerme una dieta especial: una dieta mental por cuestiones karmáticas, diría Emmet Fox. Así no puedo permitirme por siete días albergar pensamientos que no sean positivos, constructivos, optimistas, amables.
ResponderEliminarAunque pensándolo bien, necesito hacer dieta el resto de mi vida, siguiendo el consejo de John Forbes Nash, para tener a beautiful mind, pues esto es más importante que tener a beautiful body, ¿verdad?
Siempre me pones una gran sonrisa en el rostro, Tesa. Que perdure siempre la locura, las conexiones extravagantes, los sueños y tu imaginación.
ResponderEliminarSilvia Teresa:
ResponderEliminarQuerida Silvia, en mi fase de expansión corporal pruebo todas las dietas de adelgazamiento a ver si hay suerte con alguna y mi cuerpo vuelve a tener armonía, ligereza y una talla menos, que no creo en los milagros.
Aunque a veces me aburro y me salto las dietas muy restrictivas, porque encima no bajo ni un kilo.
Pero las dietas especiales como las que apuntas esas sí que intento no saltármelas,y menos ahora que necesito mucha energía mental para no perder la esperanza ni el tiempo que me queda en nada que no me haga feliz.
Un abrazo
ResponderEliminarTesa, me encanta esa forma que usas para mezclar ingredientes de narrativa y fotografía.
Tu espacio es muy especial.
Me quedo en la mesa esperando por más.
Buena tarde de domingo... hija de Ganimedes... tumbada en el sofá!
ResponderEliminarAbrazos, Tesa.
·.
ResponderEliminarVenir a leerte, y ver tus fotomontajes, es siempre una inyección de ánimo. Da gusto.
Me apunto a ese menú, y al bar de los beatos que tu presides.
BPdeMyN
· LMA · & · CR ·