Era mi dolor tan alto, que miraba al otro mundo por encima del ocaso*

Mi cuerpo, trampa-jaula, aprisiona a mi alma caminante y viajera. Desespero, me angustio y en mi sueño intermitente trato de darle ritmillo de blues a mis movimientos torpes. Mientras, a escondidas, tomo clases de vuelo por correspondencia hasta que me crezcan las alas.

"Mi cerebro me hará libre” Harry Houdini

Si te apetece, busca en la estampa las diferencias entre martirios de toda la vida y martirios actuales
-Ay, Sebastián desde pequeña los mártires me habéis fascinado. Esa manera de dejar que os maltrataran sin rechistar…sin perder la apostura…Ni la cintura. 

 -Es que somos unos santos, Tesa, y encima a  nosotros nos salía, gratis. Pero… ¿y a ti?

-Me cuesta una pasta que me claven agujas, ahora lo llaman Acupuntura ¿sabes?, y los “verdugos” tienen sonrisas encantadoras y ojos rasgados. Y los de la bata blanca te recetan extrañas y temibles pócimas sin perder la sonrisa…

-Madre del amor hermoso, ¡Qué horror! Al menos en mis tiempos se les veía venir.

- Ya te digo. Y tú. Sebas,  ¿cómo llevas lo del martirio?

- Bastante bien, siempre me hizo ilusión llegar a Santo.

- Ya… Tener un objetivo ayuda. Pero yo ni siquiera soy creyente.

- ¿NO?, qué faena, chica. ¿Ni budista ni de la New Age ni Taoísta…ni siquiera Marxista?

-Nada, guapo. Si no te importa, voy a tomar una píldora de esas que atontan y a echar una cabezadita.

-Hasta dentro de un rato, compañera. 

*el título de este post corresponde a unos versos de un hermoso poema de Manuel Altolaguirre.

Recuerda que los hijos son para siempre y que un condón puede salvar tu vida

"Un condón salva vidas"

Qué razón tienes, guapo, lo pienso cada vez que a mi Luisito le da por pasear con su amigo el siniestro. Que hasta salimos disfrazados el Toby y yo, para que no nos reconozcan en el barrio.

Pero es mi chico y lo quiero, aunque sea un excéntrico, eso es lo que es mi Luisito, clavadito a su padre…
Pero mama, al menos yo llevo calzoncillos, no como padre,  y el abanico siempre a juego, que en eso de los detalles me parezco más a ti.

 Ay, hijo, no me hables de tu padre, que mira que le gusta llamar la atención.  Me enfado con él, pero una no es de piedra… y esos correajes le dan un no sé qué… que me levanta el ánimo...
Y como tu padre es nudista hasta los tuétanos, pues  ni condones ni nada, a pelo hijo, y, hala, una siesta loca y llegaron las mellizas. Qué cruz, las niñas... y mira que son ordinarias, que Dios me perdone.
 Y hablando de Dios, con tu hermano se portó, y me mandó un  ángel. Niño, a tu padre, ni pío, que él dice que ese culito respingón del Antoñito es sangre de su sangre. 

¿Te acuerda del técnico que vino a casa cuando la liaste parda con tus equipos de música? Me dijo: señora, esto ya está, ¿necesita algo más…?
 …Y allí mismo, en tu habitación, subí a los cielos. 

Y  sí,  mea culpa, hijo, ahí reconozco que fui yo la que no quiso poner “interferencias” entre ese cuerpo diseñado para la lujuria y el mío.

Moraleja: No te olvides el condón o atente a las consecuencias.

De caza entre paraguas. Madrid. Spain

 
Lluvias frías
hasta el mono quisiera
un abrigo de paja (Bashö)

 I'm singing in the rain
Just singing in the rain
Camino por la calle cantando y disparando feliz bajo la lluvia.
 Pantalones rosas, paraguas a juego… Me pido esta deliciosa frescura para desterrar el negro de mi armario junto a mis complejos estéticos.
Llueve en Madrid y las colas para entrar al Museo de Prado se animan con la vista de la Iglesia de los Jerónimos al fondo.
 Una capucha improvisada le da a la chica un aire de virgen de la lluvia.

Un Trombón y una Tuba coquetean en el asfalto húmedo.
 Pido permiso a estos guerreros antes de disparar, acceden divertidos salvo uno…
 …que huye entre las losas empapadas.
 ... perseguido por un perro con  collar patrio en el pescuezo. 

Llueve de nuevo con más fuerza, y casi le saco un ojo al mozo que está a mi vera con el pico del paraguas. 
Como cualquier cazador que se precie me retrato con algunas de mis piezas.

 Puedo prometer y prometo que todas ellas quedaron sanas y salvas  después de enfrentarse al disparo de mi objetivo.