Autorretrato |
Cuando
tenía 7 años, decidí partirme en dos. Desde entonces, Mari Tere y yo somos un
binomio (+)
(-)
separado por un cuerpo.
-No
te preocupes,
yo cuidaré de ti -le dije entonces a la niña que llevo dentro,
secándome las lágrimas de un manotazo.
Mari Tere es intrépida, aventurera, alocada, es mi energía,
mi parte tierna, mi equilibrio.
Ahora ella cuida de mí.
…Mari
Tere me susurra: recuerda, “hay otros mundos pero están en éste”
Ella
es capaz de encontrarlos y arrastrarme a esas realidades paralelas.
Me adentro
en su Twilight Zone, en su dimensión
desconocida, en su balneario mágico, y a mi regreso me
siento ligera y audaz.
No
soporto el calor y, encima sin vacaciones, me quejo.
Y ella me lleva a refrescarme en los aspersores de los parterres de la ciudad.
Ay, Mari Tere, debe estar linda la mar… y tu perro Telesforo me hace reír con su cuerpecillo de
salchicha y su pelota amarilla como los pollitos en primavera.
Recuerdo
cuando queríamos ser indios del Canadá, qué tiempos de oscuridad aquellos, Mari
Tere…
(la foto de la foca para hacer el fotomontaje es de internet) |
Y a Canadá que nos vamos,
pero ya no queremos ser indios de las praderas, sino salvar
a las focas, que los hombres matan a palos,
a pesar de sus ojos tiernos, a pesar de que son bebés preciosos e indefensos y
la humanidad entera pueda prescindir de su martirio.
Ay, Mari Tere, el hombre es una bestia… Así que no me dejes
Anda,
ve y recorta estrellas de la azul inmensidad para hacernos pendientes y
abalorios. Carga tu barquito de papel de caracolas rumorosas que nos cuenten
con qué sueñan las sirenas…
…Pregunta
a Neptuno por qué la luna riela y en la lona gime el
viento. Qué hace
rugir a las olas y voluble a la marea.
Mari Tere, ¿está linda la mar…? Y ella me contesta viento en popa a toda vela:
…qué es mi dios: la libertad,
mi ley, la fuerza y el viento,
mi única patria la mar.
Hola, bloguers y amigos.
ResponderEliminarDebe estar linda la mar, y yo la echo de menos desde el asfalto de Madrid.
Pero la niña que llevo dentro se la ingenia para que no pase de una ligera añoranza, que me compensa por muchas razones.
Así que, con la complicidad de Mari Tere, he convertido mi añoranza en esta serie de fotomontajes y dibujillos, que además de divertirme mientras los hago, me servirán para algún cuento para mis nietas.
Espero que no hayáis dejado abandonado aquel niño que fuisteis, si es así, corred a buscarlo antes de que desaparezca del todo.
Muchos besos, y os voy visitando en vuestros blogs.
Es que eres total, muchacha. Visitarte es como entrar en un jardín umbroso, gentil, lleno de sabiduría y escondites sorprendentes.
ResponderEliminarEres una monada y Mari Tere, otra.
El mar riela y las extraña. Cuando vaya a él, mañana, te prometo, querida Tesa, que te soplaré unas gotas saladas.
Yo creo que te llegarán, eh?
¡Tesa, el mundo que nos toca caminar,no es como creemos y nuestras niñas que conviven con nosotras en nuestros cuerpos y mentes ,si les damos lugar, afloran y nos muestran panoramas inmateriales pero ,creo yo, "muy,muy",reales .Para ser feliz hay que caminar la vida,pisando una pequeña nube, sin llegar al áspero suelo!!!Un beso Martha
ResponderEliminarsomos muchos aquí dentro de mi cabeza, uno de llos es la nena tímida que todavía soy, aunque algunos no lo crean. besos!
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ResponderEliminarCuida a Mari Tere. Sin ella, serías otra y no te gustarías... y nosotros sufriríamos las consecuencias ya que perderíamos tu frescura y creatividad.
La primera foto es una pasada.....aaaaaaaa....
· BPdMyN
· CR · & · LMA ·
Todos llevamos un niño en nuestro interior la tuya esta sana y fuerte.
ResponderEliminarUn abrazo¡
Nunca dejes de mimar a Mari Tere, cuídala, dale todos los gustos y escúchala. es una niña sabia...
ResponderEliminarTus entradas me alegran el corazón.
Le das un abrazo grande de mi parte a Mari Tere!
Y otro abrazo para Tesa (no quiero que se ponga celosa) jajaja.
ResponderEliminar¡Navega velero sin temor y lleva a la niña que Tesa mantiene viva a las costas de las almas más lejanas!
ResponderEliminarIntrépida Mari Tere sigue navegando por mucho tiempo.
Esa Mari Tere me cae estupendamente bien, se le ve que está hecha de mar y quizá es por eso que es tan salá :)
ResponderEliminarAhí va una barca de besos para ella...
Y que no se me olvide, me encantan las fotos, Tesa, están geniales.
Un abrazo muy grande desde el Mediterráneo (justo ahora me estaba él hablando de ti, y me ha confesado que por las noches, cuando duermes, te visita y te da lametones, porque sabe lo mucho que le echas de menos)
Besos :)
Me encanta esa Mari Tere, sabe muy bien lo que se hace, harás muy bien cuidándola y mimándola. Hacéis una excelente pareja.
ResponderEliminarMagníficas fotos pero la primera es una delicia.
Un gran abrazo
¡Qué bonito, Tesa!
ResponderEliminarTu corazón, inmenso, sigue tan chispeante como la espuma del mar.
Ese niño que todos llevamos dentro... esta semana he releído "El principito"
Sí, está linda la mar, y emocionada con tus imágenes y palabras, como yo.
Un abrazo.
Cuantas veces te leeré y siempre pensaré lo mismo Tesa...eres imprescindible.
ResponderEliminarMari Tere merece ser cuidada, como tu hiciste con ella hace tiempo...nunca os abandonéis, dos en una, algo que muchos olvidan...dejan su encanto infantil aparcado y empiezan a arrugarse como pasas, pero no por fuera, sino por dentro....
Un abrazo descomunal!
¡Ay, Mari Tere, cuida siempre de tu sombra que aunque se haya hecho mayor todavía no es lo suficientemente oscura como para robarte los rayos del sol que te harán crecer!
ResponderEliminarY que sepas que caminará siempre a tu lado, así las tres (Tesa -que así se llama tu buenasombra-, la Mar y tú) podréis seguir repartiendo rollo positivo en un mundo tan negativo...
Petonets.-
Cuando era pequeña mi madre me recitaba estos versos y yo no me cansaba nunca de que lo hiciera una y otra vez. Siguen gustandome igual. Yo creo que nunca he sido muy niña, me recuerdo adulta, hay algo que percibo dentro, a veces, y siento ganas de soñar, quizá esa sea mi niña.
ResponderEliminarMaravilloso post.
Un beso
SAM:
ResponderEliminarGracias, Sam, por estar siempre ahí. Mi corazón asusta a los fonendos, así que prefiero que sea ligero, es más fácil de llevar.
Ah, estoy viendo mucho cine antiguo que olvidé o me perdí, pero... Shshss!, no se lo digas al gobierno.
Un abrazo, Samuel.
Que nunca muera ese niño que llevamos dentro :-)
ResponderEliminarMe han encantado los montajes del barquito. Tienen una magia especial.
Abrazos.
¡Cómo me ha gustado, esta Mari Tere que vaga por la mar, en busca de nuevos puertos, sueños... siempre adelante !!
ResponderEliminarEs bonito lo que escribes, un precioso cuento para tus nietos y para todos los niñ@s (la niña que llevo dentro, dice que le entusiasma).
Un abrazo desde mi azul mar Tesa :)