El calor cortocircuita mi precaria cordura



"Más amor y menos calor", grafiteo por las paredes dando saltitos sobre el asfalto ardiente, como un bicho raro de esos que salen en los documentales de TV caminando por parajes inhóspitos. 
Ordeno a mi pensamiento cerrar las puertas al verano para que el otoño se adelante con su aire fresco, su luz, olor y color y reanimen a esta momia que “veranea” obsesiva tachando con placer los días calientes del calendario.
Mientras el gato de mi vecino maúlla lastimero añorando un edredón esponjoso de Ikea donde esconderse a ronronear y soñar. Te comprendo, minino.
Intervengo los grafitis que encuentro a mi paso y los acomodo a mi anhelo otoñal. El calor me vuelve majara.
Pregunto a los veraneantes felices ¿por qué les gusta el calor? Los únicos sinceros son los viejos. Me cuentan que les alegra el cuerpo ver pasar a las mujeres ligeras de ropa.

-No importa la edad, todas tienen su encanto-me dice uno- En invierno van tan tapadas que no sabes ni quien te saluda.

-En invierno también podemos estar sexys, señores míos. No hay nada que caliente más que el látex… si sabes cómo usarlo.


 Me vista como me vista y aunque no me mire ni el león de la Metro-Goldwyn-Mayer no soporto el calor.  


Sorprendida por dos goterones de tormenta que se estrellan contra mi balcón, resucito cual momia deshidratada que se esponja. Y, como si esas gotas fueran el elixir de la vida, me pongo en marcha con precaución. El otoño se acerca, me animo. 

-Hola, hola… ¿Hay alguien ahí?

26 comentarios:

  1. Hola, amigos, espero que lo estéis pasando de película. No como yo.

    Nunca me ha gustado el verano, de niña y cuando era más joven me desmayaba con el calor, pero es que además éste verano de 2016 ha sido nuestro “verano horribilis”

    Los médicos nos han mandado todo tipo de pruebas menos la autopsia.

    Hemos sobrevivido, maltrechos, pero ahí seguimos, sin rendirnos y todavía con buena pinta y escasa medicación, pese a “ese hacerse mayor sin delicadeza”

    Gracias a todos los que habéis pasado por el Almacén estos días de desconexión y a los que todavía os atreváis a venir hasta aquí y dejar un comentario.

    Os prometo, que ya desmomicada, aunque todavía hace mucho calor para mi gusto, os iré visitando poco a poco a todos…

    Muchos besos,

    ResponderEliminar
  2. Feliz septiembre!que gusto que hayas regresado!Un tanto maltrecha por el calor pero por suerte tu creatividad intacta.Por allí aires de otoño, por aquí de primavera...las dos mas bellas e inspiradoras estaciones. Ya puedes salir al balcón a esperarlo.
    Hoy sumo a mi alegría por septiembre la de tu regreso.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Anónimo3.9.16

    Pues se espera un finde de aupa!
    Más calor!
    A mi tampoco me gusta el verano, y parece que tardará en irse, en fin...

    Tesa, yo me he puesto el aire a 24 grados y creo que no me despego del pc, estoy fresquita, o veré la tele o leeré... No salgo de casa!

    Este post que has hecho está muy acertado.
    Me despido amiga, un besote!

    Ah! Ayer sabes que leí???
    Me cayó en las manos...
    El loquero, el gato chiflado y la niña de los pies grandes.
    Un gustazo enorme, qué bien...
    Con el traslado de casa van saliendo libros, objetos, cosas... Ya me aclimato, poco a poco...
    Ciao cielo, un placer hablar contigo de nuevo!

    ResponderEliminar
  4. Siento decirte que me gusta el verano y que tengo tan pocas ganas de que se vaya, como las tuyas de que se quede.
    Así es la vida.

    ResponderEliminar
  5. TRACY: No lo sientas, Tracy. Envidio a las personas que viven en lugares calurosos con noches a 30 grados y les gusta el verano. Me parecen seres extraordinarios.

    A mí también me gusta el verano, pero que no pase de 22 grados, cerca del mar, con aire acondicionado en casa, con arboledas sombrías por donde caminar... No tener que trabajar...y que todo lo que me hace sudar me lo haga un robot.

    Un beso,

    ResponderEliminar
  6. Llegaste de primera con hermosas imágenes sacadas de las infinitas partes de tu mente.
    Te extrañaba ....
    Tu calidez dormida se dispara cuando aparecés en pantalla ...
    El otoño se acerca y el calor que esta metido en el verano de Miami se irá lentamente dejándonos hartas de sudor de un verano
    Brindo por vos y por tu blog hoy amiga

    ResponderEliminar
  7. ¡Oh, Tesa!
    A mí me pasa lo mismo, pero además en verano escasea la indumentaria, y yo he leído que tengo a Venus exaltado en mi signo... el de los pececillos. Un infierno, vamos, el verano es un infierno para mí, y para combatirlo he estado leyendo sobre el diablo, que da menos miedo que lo que está pasando en las calles y en las cortes...
    Genial lo de "más amor y menos calor".
    Un abrazo, y gracias por volver, como la brisa.

    ResponderEliminar
  8. SAM:
    Hola, Samuel, ya me pasé por tu nuevo espacio, interesante como siempre.No paras, madre mía, cómo puedes.

    Y encima leyendo cosas del diablo, cuando era pequeña las monjas nos aterrorizaban con él, así que como sólo se teme lo que se desconoce me dio por leer historias de Lucifer, aunque le llamábamos "el Antonio" para no invocarlo y tener que decir "ave María Purísima" a cada rato.

    Ya ves, Sam, creo que de "aquellos polvos estos lodos" Nuestra historia pasada tiene mucho que ver con lo que ocurre en este país.

    Un abrazo, Sam, y que el otoño irrumpa fresco y límpio para aliviar nuestros cuerpos y espíritus.

    ResponderEliminar
  9. Pues no, no, el calor no tiene ganas de abandonarnos, amiga Tesa...
    Hoy en esta ciudad donde vivo hay 39ºC, nos vinimos de la playa que este año ha hecho casi frío por las noches, el viento de Levanta nos ha acompañado durante los dos meses. Habrá que volver...

    Espero que las dolencias sean las propias de la edad y que se queden ahí con alguna que otra pastillica.

    Hacía tiempo que no te visitaba, siempre es un placer disfrutar de tu magnifica creatividad
    Besicos
    Carmen

    ResponderEliminar
  10. Pues si la calor te inspira tanto
    ... visitarte en otoño será un paseo por el país de las de las Delicias

    ResponderEliminar
  11. Ay, querida, Tesa. Veo que no eres amiga de las altas temperaturas...
    Me encanta esa manera tuya de contar las cosas y ese puntito de ironía fina que le aportas.
    Estoy pasando unos días en Pamplona, y hace un calor insufrible. Bien es verdad, que a mi me gusta, no en vano viví siempre en Sevilla, pero ansío volver al pueblín y pasear al atardecer por la orilla del Carrión con la fresca de la tarde.
    Te envío un beso de bienvenida.

    ResponderEliminar
  12. Querida Tesa, muy original y divertida tu entrada, las imágenes me han encantado.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Hola..Hola.. Soy yo, vuelvo a estar aquí, aunque con estos calores, me dan ganas de desaparecer.. Como es posible que de un relato ardiente, caluroso, eres capaz de hacer algo fresco como la brisa..
    Y es que tienes arte. y sensibilidad, oye casi me ha salido un titulo de una novela de Jane Austen..
    Un abrazo.. me alegra reencontrarte..

    ResponderEliminar
  14. Los médicos nos han mandado todo tipo de pruebas menos la autopsia.


    No puedo para de reirme

    ResponderEliminar
  15. Mi Tesa querida. A ver si pasa el calor y vuelvo. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  16. Aquí estamos, amiga... A 44 grados a la sombra...

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  17. Buen dia Bella compa♫era
    Fascinante to comentario
    Gracias
    Quizá no tengo ni hago todo lo que me gustaría, pero amo todo lo que tengo y hago"

    ResponderEliminar
  18. cómo te entiendo! incluso desde este invierno de buenos aires, que este año se tragó al otoño y amenaza con tragarse a la inminente primavera. aún así, no te añoro verano, sé que en cuanto llegues voy a odiarte!

    ResponderEliminar
  19. Pues sí, estamos todos Tesa, o por lo menos la mayoría. Pendientes del margen derecho a ver cuando volvías a la vida... literaria. Pues de la otra ya veo que vas bien servida :)

    Un abrazo.

    ResponderEliminar

  20. Tranquila Tesa, que va llegando a pasito lento, el añorado otoño: la plus belle saison ...

    Y volveremos a ser "casi felices" con el alma al viento y las ideas fresquitas.

    Un abrazo, con sirimiri y todo. Un gusto disfrutarte.

    ResponderEliminar
  21. ¿"Cuando acabamos de deambular? No sé, no creo en el más allá, así que imagino que cuando nos desconectemos del más acá. En sentido más poético, creo que el hombre muere cuando se rinde, cuando no siente emoción ni curiosidad por nada."

    Bueno Tesa, hay una realidad más allá de las creencias y lo que ignoramos...

    ¿Preguntas qué cuándo se acaba el deambular? ¡Pues cualquier día! jajjajajaja...

    Principalmente cuando hayas llegado, o despertado, pues no se requiere ir a ningún sitio especial, ni sagrado ni mundano.

    La pregunta es buena, como casi todas las que se hacen que "no necesita" respuesta.

    Un gran abrazo, amiga.

    ResponderEliminar
  22. Hola Tesa! Muy sagaz el texto con un tandem perfecto con los fotomontajes, o viceversa, con esa chispa de humor inteligente que te caracteriza. Felicidades!
    Un beso :)

    ResponderEliminar
  23. Parece que ya se huele el otoño, aunque yo soy "animal" de verano, me alegra el cambio de estación.
    Besos

    ResponderEliminar
  24. Saludos Tesa
    quien deambula con una intención o tal vez sin ella , tiene la gracia de encontrar cosas divinas en el camino y de ellas descubrir su belleza, como sucede aquí
    que siempre tienes que contar en palabras e imágenes muy bien hiladas.
    mis respetos de siempre.
    pases lindos días también.
    Por aquí ya comenzará la primavera.

    ResponderEliminar

  25. Hola, si hay alguien aquí, uno que se pasea por tus post para ver si me arranco una sonrisa por obra y gracia de tus creaciones... y objetivo conseguido.

    BPdMyN

    · LMA · & · CR ·

    ResponderEliminar
  26. ¡Hola, aquí estoy!Bueno, sí que es refrescante regresar al almacén. Me haces reír tanto, Tesa.

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.