Sólo necesitaba equilibrar mi línea de flotación. Volver al mar dejar que mis ojos se alinearan con el horizonte y desconectar del ruido y las interferencias.
Decía Pessoa, que los viajes son los viajeros. Y lo que vemos es lo que somos. Aquí os dejo algo de lo que vi o… quizás de lo que soy.
Un hombre leyendo y paseando a la orilla del mar. Insólito. Tanto como que en Zarautz no vimos a casi nadie enganchado al móvil. Y ninguno si estaba en compañía.
Tuvimos un tiempo muy variable, nubes, claros, nubes y llovizna. Pero hicimos como los lugareños no prestar atención al tiempo. También las fotos "sufrieron" esa luz o falta de luz de este clima norteño.
Pasear mirando el mar, cerca del mar, dentro del mar… aunque sólo fueran los pies.
Ponerse en forma haciendo malabares en la arena. La chica moldeaba las bolas en cuclillas, no más de cuatro, se incorporaba y hacía su juego malabar. Así una y otra vez.
Para mi nieta Nora, esta ballena beluga, que no franca, la única ballena que encontré en un montón de kilómetros en los que nos movimos.
Ay, si el gobierno vasco encargara el merchandising a un catalán...hasta volverían las ballenas
Y seguimos encontrando en nuestro deambular personas que pasan de la pantallita. ¿Estaremos en otro planeta?
Decía Mark Twain que no hay forma más segura de saber si amas u odias a alguien que hacer un viaje con él. Estoy de acuerdo.
No hay muchos compañeros de viaje y de vida capaces de colgarse mis enormes botas con este estilo y sin complejos mientras me remojo…Ya lo decía mi madre, "hija, qué desgracia tener los pies tan grandes"
Me traje los ojos llenos de mar y los bolsillos llenos de piedras recogidas en la arena, que acaricio evocando a las ballenas, a todas las ballenas que aún surcan todos los mares que añoro.
Hola, de nuevo. Se me acabaron las excusas para estar apática o falta de ideas.
ResponderEliminarCon esta escapada, he equilibrado mi línea de flotación y alimentado a ese animal marino que llevo dentro. Además n mi ciudad hace fresquito y se instala el otoño, mi estación favorita.
La verdad es que aprovecho mucho los viajes, aunque sean cortos, para cargarme de energía.
Tengo la suerte de ponerme “zen” desde que salgo de casa, y no me impaciento por nada.
No consulto la prensa, no veo tele, ni escucho las noticias, no me llevo el portátil y mi teléfono sólo sirve para llamar y que me llamen.
Me gusta desconectarme del todo.
Pero ya estoy conectada de nuevo, así que me iré pasando por vuestros blogs en mis ratos libres y espero que cuando las musas pasen por mi balcón me encuentren trabajando alguna idea.
Muchos besos,
Hola Tesa!Como desde que te descubrí, me maravillas.Pude sentir calma, sosiego felicidad y ver mucha belleza. Todo lo que has pasado en el mar lo trasmitiste en esta entrada con tu exquisito estilo ¨Tesiano¨, en el cual por supuesto no faltó el humor...Y el amor! Que genial la foto de los botines con el relato que adjuntas.
ResponderEliminarABRAZO Y ES MI TURNO DE VACACIONES, estoy a horas de partir
Hola Tesa, me has transmitido una serie de sensaciones muy agradables junto al mar Cantàbrico, esas luces y nublados que me encantan, esa armonìa que solo se encuentra en playas desérticas, y tu mirada que capta todo lo esencial, la poesìa de las cosas comunes... Fotografìas de gran belleza, y yo como tù cuando viajo me desconecto completamente de internet, solo escucho la radio en el coche y el mòvil para saber de quienes quiero...me vuelvo zen como dices tù, y me basta una escapadita de dos dìas...
ResponderEliminarHas vuelto con todas tus Musas, Tesa; yo prefiero la primavera porque huelo las vacaciones, el otoño aunque es bello tiene el inconveniente de que es el momento de organizar todos los proyectos y a un ritmo bastante agobiante, pero bueno, todo es engranar y noviembre ya me gusta màs...
Por cierto, imagino que la ballena blanca le habrà encantado a tu nietita porque es preciosa. Un abrazo grande :D)
El cantábrico, mi cantábrico .. Y esa paz que transmite aún en su espiral de furia, invadiendo nos de calma.
ResponderEliminarMe encanta pasear por su costa y sentir esa magia, la que tú nos trsladas!
Un abraz✴
Me ha maravillado tu entrada, tengo muchos puntos de vista en común contigo y esa frases que nos has brindado no pueden ser más reales. Gracias por hacerme disfrutar leyéndote.
ResponderEliminar¡Ah! y bienvenida.
Hola Tesa... El Cantábrico es un mar especial, furioso, pero a la vez que tierno, es como una mujer morena de ojos verde intenso, que difícilmente se le aguanta la mirada, del reflejo que desprende, calma las ansias, y relaja los nervios, porque el tiene mas ansias, y mas nervio que uno mismo...
ResponderEliminarZarauz, es el sitio ideal, para relajarse viendo la espuma de sus olas, escuchando ese rugir que suavemente se rompe contra las rocas...
Un abrazo....
PD.. Estate segura que volverían las ballenas...
Guau, un excelente reportaje de vivenvias este que nos muestras...
ResponderEliminarMe alegro mucho de sentir que estas ya con las pilas recargadas y de nuevo en accion.
Un abrazo, y feliz semana
Te trajiste los ojos llenos de mar, guárdalo para soñar cuando los cierres y vivas la dulce caricia de las olas.
ResponderEliminarY mientras tanto, acaricia las piedras en tus bolsillos. ¿Cuantos millones de siglos puede que tengan esas piedras? ¿Por cuántos caminos habrán rodado? Cuántas veces habrán hecho cantar al agua.
Me fascinan las piedras y su historia silenciada. Es por eso que cuando me voy a caminar por las orillas del río también me traigo los bolsillos llenos de esos preciados y preciosos cantos rodados.
TIEMPO vivido, lleno de belleza, de imágenes que integran lo que realmente importa, lo esencial.... Lo has enmarcado muy bonito entre palabras que ayudan a sentirse contigo en ese halo de ternura y bravura. Gracias Tesa por traernos ese mar a casa.
ResponderEliminarBesos y rebienvenida a esa musa que te habita.
TIEMPO vivido, lleno de belleza, de imágenes que integran lo que realmente importa, lo esencial.... Lo has enmarcado muy bonito entre palabras que ayudan a sentirse contigo en ese halo de ternura y bravura. Gracias Tesa por traernos ese mar a casa.
ResponderEliminarBesos y rebienvenida a esa musa que te habita.
Nos has traído un Cantábrico fresco y lleno de good vibrations. Así da gusto.
(Se os ve muy bien) ¡Que bien se os ve...!
BPdMyN
· LMA · & · CR ·
Bueno Tesa, felicidades por esos preciosos días de disfrute de relax y de la mejor compañía. Guapo él y bellísima tú. Que sigáis siendo felices por muchos años. Disfruto de la felicidad ajena, como si fuera yo misma.
ResponderEliminarUn abrazo grandote.
Qué gusto embarcarse en un viaje donde los móviles son cosa que no hace falta y se disfruta del aire, del mar, de los libros y de observar.
ResponderEliminarQué bonito reportaje Tesa. Me ha encantado.
Un beso.
:) Viajes para ir y volver de donde un@ no quiere irse nunca.
ResponderEliminarY que una nube enamorada se cuelgue las botas de su lluvia favorita. Y, claro, que su lluvia favorita le recite olas de fuego y paz a cada paso que da :)
Un abrazo, Tesa.
Tesa, menos mal que no hizo mucho caso de ese "Nunca te cases con una mujer con los pies grandes", ¡lo que se hubiera perdido!
ResponderEliminarBonitas fotos, con esa luz tan viva y despierta, atenta a las pequeñas maravillas.
Un abrazo.
Ay, Samuel, Xavi dice que no se fijo en pies, luego, cuando lo hizo ya no tenía remedio...
ResponderEliminarLo bueno era que cuando era joven, en rebajas, encontraba unas gangas de zapatos italianos monísimos, porque no había muchas mujeres con los pies grandes, pero ahora, mi número es el primero que se agota...
Me ha faltado en este mar Cantábrico poder traerme una "mångata" "La luna en el mar riela", que decimos nosotros y a la que los noruegos le hacen una carretera con esa palabra sin traducción. Muy interesante esa recopilación que estás haciendo, Sam.
Un abrazo,
Me encantó leerte. Se trasmite paz en este escrito a pesar el mar revuelto. nombraste a Pessoa al que adoro y te llenaste los ojos de mar, no podías haberlo hecho mejor.
ResponderEliminarPasé un ratito muy grato releyéndote hoy.
Bello Zarautz, bellas fotos y bellos vosotros, también por dentro, bueno por dentro más, si cabe.
ResponderEliminarMe alegro de que hallais recargado las fuerzas, nunca estás de más. La ballenita de goma me ha parecido más delfin, pero bueno a falta de las de verdad nos puede servir.
Besos
ResponderEliminarHola Tesa.
En mi tierra
siempre habrá sirimiri.
Peces de plata
que acuna el Cantábrico.
Paisajes de verde profundísimo
y veleros de incierta singladura.
La próxima vez, si pasas por Donosti, llámame y tomamos un café frente a ese mar...
Feliz regreso. Besos
Precioso pasear por tu mundo de evasión y naturaleza
ResponderEliminarlejos de la rutina diaria. Un besote. Thoti
Boa tarde, mesmo sem baleias a fotorreportagem do belo mar, apresentação da mesma é perfeita com muito gosto.
ResponderEliminarAG
SENTÍ POESÍA!!!
ResponderEliminarABRAZOS
Tesa, es una gozada tu escapada que nos revelas en tu post. Da gusto acompañarte por esos mares, hasta me siento una rediviva ballena franca nadando en calma por tus letras e imágenes. Me transmites ese estado zen. Gracias.
ResponderEliminarEres un encanto. Tu entrada me llena de alegría.
ResponderEliminarHola Tesa, veo que te gusta el mar, como a mi, tú el Cantabrico, yo el Mediterráneo, el tuyo con el agua más bien fria y el mío con el agua más bien templada, pero los dos hermosos.
ResponderEliminarMaravillosas fotos has sacado en esta entrada, se ve que has pasado una bonitas vacaciones, gracias por compartirlas con nosotros tus amigos blogueros.
Beosos, feliz semana.
Hola
ResponderEliminargusto en saludarte y gracias por visitarme...
me llevo una gran alegría de leer tu trabajo
esta llenos de ideas sin fin...de la manera que abordas la vida por tus ojos es algo muy bello
dejas un reguero de vida en cada palabra y vivenciar el sentir
conversar a cada paso la vida
felicitaciones
Hola Tesa, solo vengo a saludarte y desearte una feliz semana.
ResponderEliminarTambién venía para comprobar si habías sacado otra entrada, pero veo que no, iré visitándote hasta que la saques.
Besos, feliz semana.
Espectacular, saber que sigues bien y en plena forma me hace feliz.
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